Nuestro Coach Martin o “BronceQuest” (su nickname de gamer) nos comparte que es lo que él ha visto después de 10 años al jugar en línea y observar los riesgos que los niños pueden presentar.

Como padre seguramente te preguntarás si estás haciendo bien en dejar a tu hijo jugar a los videojuegos, o bien, si se necesita algo más para llegar a la tranquilidad de que así es.

En esta guía vamos a hablar de varios tips para considerar antes, durante y después de las sesiones de juegos de sus hijos.

Antes de empezar a jugar:

Como todos, su hijo estará emocionado o apurado por querer hacer algo que le gusta; por lo mismo es importante que antes de empezar a jugar esté completamente libre de tareas del colegio, trabajos, y de sus responsabilidades en general, ya que además de ser sumamente molesto jugar teniendo un pendiente, no es bueno que se sobrepongan los videojuegos a los estudios y por lo tanto puede ser un gran incentivo para su hijo el terminar las tareas para así llegar a su tiempo de juego.

Durante que se está jugando videojuegos:

Este punto puede ser el más preocupante como padre al ver a su hijo gritar, reír, enojarse, o cualquier otra emoción mezclada en lapsos cortos de tiempo; y eso es completamente normal pero eso no quiere decir que las emociones y reacciones que a veces pueden salir de su hijo sean sanas para él como persona.

Las emociones que se viven en un juego

Como padre seguramente ha tenido oportunidad de escuchar a su hijo gritando por cualquier razón dentro de un videojuego, lo cual para algunos es una reacción completamente normal en sus actividades, para otros niños es algo nuevo ya que le causa muchísima emoción, y dentro de esa emoción hay un grado óptimo.

¿Que cuidar? Como padres al observar a nuestros hijos al jugar durante cualquier lapso de edad, las emociones en extremos llegan a ser impulsivas y por lo tanto dañinas, son casos muy particulares pero que si se ven es sumamente recomendado hablar con el, entender que le está frustrando o enojando y así evitar repeticiones, tales como gritar groserías, insultar, golpear objetos, o similares que son actitudes que se dan en cualquier actividad competitiva pero no por eso es positivo.

En Gabu nosotros como coaches estamos capacitados para hablar con paciencia y evitar que los niños digan o hagan tales acciones para que puedan jugar de manera armónica, conozcan los comportamientos aceptados y así respeten a otros niños, sacando el mayor provecho del lado positivo de los videojuegos.

Tiempo determinado o tiempos fijos

Yo he sido gamer y desde mi perspectiva creo recomendable que en menores de 12 años tengan horas limitadas de juegos virtuales, ¿por qué? Por la razón que en temprana edad aún están entendiendo los límites y que para su desarrollo otro tipo de actividades como el poder divertirse con juguetes, peluches, actividades al aire libre, es bueno para su desarrollo, más el crear esa rutina o tiempos es algo que a los niños les es difícil.

A medida que crece y más si se convierte en un gamer como yo, estarás más tiempo en juegos electrónicos, pero con todo el aprendizaje y socialización que aprendiste en otras actividades y eso te da herramientas para desarrollarte.

¿Que sugiero funciona?

Recomendaría dos estrategias para que su hijo además de tomar las horas de juego como un incentivo extra, también las disfrute son las siguientes:

1. Horas de juego por día

Las horas de juego al día pueden ser muy beneficiosas como un premio a su hijo por culminar su tarea y la mejor manera de aprovecharlo es con actividades ya sea con sus amigos o bien en sitios sanos, en Gabu por ejemplo los coaches tienen un repertorio de actividades (que han jugado repetidas veces para confirmarlo) para que su hijo pueda disfrutar del juego en sesiones controladas libres de ambientes tóxicos y con la posibilidad de tener “gaming partners” que le ayudarán a crecer como jugador.

2. Viernes, sábado y domingo.

Una estrategia que personalmente me gusta mucho (ya que de hecho con ella crecí yo) fue que toda la semana no utilizaba videojuegos, hasta llegar al codiciado viernes y poder desempolvar mi Nintendo que me había estado esperando.

Lo positivo es que realmente uno durante la semana no piensa en videojuegos y en la época que yo crecí realmente disfruté muchísimo las sesiones de juego durante los fines de semana, no tenía mayor responsabilidad que durante la semana que tenía que estar preocupado por cosas del colegio.

Lo interesante de los juegos ahora, me atrevería a decir que el 90% de los videojuegos necesitan de un “log in” diario de parte de sus jugadores para recibir recompensas o bonificaciones, así como para mantener tu progreso, por lo tanto recomendaría combinar este método con un par de horas de juego diarias para completar dichas tareas diarias o bien, ¡como un pequeño incentivo!

¿Qué está jugando mi hijo?

Es excelente que confié en el discernir de sus hijos para buscar el videojuego que más le gusta, seguramente ha de elegir juegos animados, quizás de disparos, algunos otros de construcción y muchos otros géneros que pueden llevar a su hijo a tener horas y horas de diversión, pero ¿Qué hay escondido tras esos dibujos tan caricaturescos y minimalistas?

En casi todos los casos, pues es eso, absolutamente nada malo, pero es muy recomendable revisar la etiqueta de “ESRB” de su videojuego para saber la categoría de este (o incluso mejor si es una crítica especializada por Gabu) o bien, en sesiones de juegos de Gabu que tienen juegos evaluados para que su hijo además de divertirse no tenga que toparse con nada que pueda ser perjudicial para su edad.

Después de la sesión

Este paso puede ser el más sencillo o bien el más confuso. Su hijo al culminar su sesión de videojuegos será un tren de emociones con todo lo que acaba de ver y necesita procesar y usted como padre tendrá la tarea de escuchar como su hijo le cuenta términos del juego que quizás no conoce y nunca conocerá, juegos con nombres extremadamente raros repetidos muchas veces, personajes, objetos, mercadería, amigos del juego, acciones del juego y mucho más relacionado al juego que en muchos casos no llegará a entender en su plenitud pero su hijo con mucho cariño se lo contará para decirle que se la pasó muy bien o mal en su defecto.

Recomiendo escuchar lo que le diga su hijo para saber como se la está pasando con el juego, que clase de sesiones de juego tiene o bien sencillamente para conocer aún más a fondo del videojuego de su hijo, sin lugar a duda tendrá muchas peticiones de mercadería del juego ya sea camisas, juguetes, peluches y demás variedad; Esto es algo que puede negociar con su hijo en concederle comprar, pero no es necesario para jugar.